lunes, febrero 07, 2005

Barcelona nunca fué tan fría

Tan sólo una taza de café y un habano,
checar entre las sabanas montones de mensajes en el móvil,
mirar cortinas de blanco algodón ondeando frente al mar,
el mediterraneo, un colchón, un resguardo,
lejos del frío, el extraño y el ruido
¿Acaso es mucho pedir recostado en esta banca del parque?